El relleno está compuesto de copos de espuma viscoelástica mezclados con fibra de poliéster. La fibra aporta confortabilidad y la espuma (en este caso viscoelástica) aporta resilencia-recuperación del relleno y una correcta adaptabilidad al cuerpo del animal.
Al mezclar estos dos materiales se consigue un altísimo grado de confort, mejorando el descanso y protegiendo el bienestar y la salud de la mascota.